– Mesa por la Hospitalidad –
NO REABRIR LOS CIE:
CARTA AL GOBIERNO Y QUEJA AL DEFENSOR DEL PUEBLO
La Mesa por la Hospitalidad de la archidiócesis de Madrid (integrada por la Comunidad de Sant’ Egidio – Justicia y Paz – Cáritas – Confer Migraciones – Pueblos Unidos – Sercade – Delegación de Pastoral de la Movilidad Humana), hemos enviado una carta criticando la reapertura de los CIE (Centros de Internamiento de Extranjeros) al Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; al Vicepresidente 2º, Pablo Iglesias; al Ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska; al Ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, y al Defensor del Pueblo, Francisco M. Fernández Marugán.
La Mesa ya intervinimos contra esta reapertura el 27 de septiembre pasado, con motivo de la Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado. En la carta enviada ayer, denunciamos que el Gobierno ha hecho «oídos sordos a ese clamor» y pedimos alternativas. «¿Tendremos que esperar a lamentar alguna desgracia para volver a denunciar la oportunidad perdida de buscar otras alternativas dignas y humanas a la detención de personas administrativamente indocumentadas?». La carta termina con «la esperanza de que el Gobierno de España revoque una decisión tan profundamente contraria a la dignidad humana y nuestra sociedad dé un paso adelante en la búsqueda de otros mecanismos de acogida, protección, promoción e integración de los inmigrantes y refugiados».
[foto by Claudio Álvarez]
Lee aquí abajo la carta completa (es la dirigida al presidente del Gobierno, el texto central es el mismo en las demás cartas y en la queja al Defensor del Pueblo, o descárgala pulsando aquí.
Pensar que el indocumentado es un delincuente,es decir que la libertad y la vida es una utopía para pocos.Me niego a asumirlo.
Totalmente de acuerdo, Isabel. Además, el asunto se hace más sangrante cuando hasta las mismas autoridades reconocen que un CIE es peor que un centro penitenciario. Los CIE no tienen recursos educativos ni sociales, más allá de lo (poco) que se deja hacer a voluntarios de entidades eclesiales o sociales.
Gracias por su comentario.